Coralie Fargeat dirige esta película protagonizada por Demi Moore como Elisabeth Sparkle, Margaret Qualley como Sue y Dennis Quaid como Harvey. El reparto también incluye a Hugo Diego Garcia, Gore Abrams y otros actores en papeles secundarios.
Sinopsis: Elisabeth Sparkle, una famosa instructora de aeróbicos y estrella de televisión, es despedida en su 50 cumpleaños. Desesperada por recuperar su antigua gloria, descubre una droga del mercado negro llamada "La sustancia" que promete crear una versión más joven y perfecta de sí misma. Al probarla, nace Sue, su alter ego más joven interpretado por Margaret Qualley. La única regla es que deben intercambiar roles cada siete días. Sin embargo, la tentación de permanecer en el cuerpo joven resulta demasiado fuerte, desencadenando consecuencias aterradoras.
El Público
Las opiniones del público sobre "The Substance" son variadas y apasionadas. Muchos elogian la trama por ser audaz y provocativa, abordando temas como el envejecimiento y la obsesión por la juventud de manera impactante. Las actuaciones de Demi Moore y Margaret Qualley son ampliamente alabadas, con algunos considerando que Moore ofrece una de sus mejores interpretaciones. La dirección de Coralie Fargeat es descrita como precisa y efectiva, permitiendo a la audiencia sumergirse completamente en la experiencia. Los efectos especiales y la cinematografía son destacados por su naturaleza grotesca y perturbadora, con muchos comparando el estilo visual con el trabajo de directores como David Cronenberg. En cuanto a su lugar en el género, varios espectadores la consideran una de las mejores películas de terror corporal de los últimos años, aunque algunos encuentran el final demasiado extremo o polarizador.
Opinión: ¡Vaya viaje! "The Substance" es una montaña rusa de emociones que te deja con la boca abierta y el estómago revuelto, pero en el mejor sentido posible. Coralie Fargeat ha creado una obra maestra del horror corporal que no solo asusta, sino que también hace pensar. La actuación de Demi Moore es simplemente brutal, te hace sentir su desesperación y su locura. Y qué decir de los efectos especiales, son tan asquerosos que no puedes dejar de mirar. Es como si David Cronenberg y Black Mirror tuvieran un bebé retorcido. No es para estómagos sensibles, pero si te gusta el cine que te desafía y te incomoda, esta es tu película. Te garantizo que saldrás del cine cuestionando tu propia relación con el envejecimiento y la belleza. Una experiencia cinematográfica única que no olvidarás fácilmente, aunque quizás lo intentes.
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