Bienvenidos a todos a este nuevo artículo. Espero, mis queridos lectores, que estéis teniendo un buen día y una buena semana. Aunque, si no es así, espero que lo que estáis a punto de conocer hoy, os saque una sonrisa. Aunque algunos ya me conocéis y habéis leído más artículos como este, hoy vengo a contaros y a enseñaros un tema muy especial, que cómo es evidente, está todo relacionado con el arte y la animación. Y es que, junto con José Antonio Martín, hemos realizado un… ¡cortometraje de animación! Ea, ya está dicho. Y ahora, ¡Comencemos!
Presentación e idea
Seguro que os habéis quedado impactados, y para aquellos a los que le interese el mundillo del arte, en este artículo explicaré el largo proceso recorrido para poder llegar al arte final (el cual, podréis ver al final de este). Lo primero que tenéis que saber es quiénes somos. Hace bastante tiempo que me dedico a escribir este tipo de artículos pero en ninguno de ellos me he parado a contar novedades sobre mi y mi trayectoria. Así que, creo que ha llegado el momento. Hola a todos, soy Carla Vidal y básicamente, acabo de terminar mis estudios sobre animación por lo que, oficialmente, ya soy animadora 2D. ¡Yupi! Para contaros un poco más sobre mi, de pequeña siempre he odiado la asignatura de plástica, surrealista, ¿Verdad?. Entré en este mundillo gracias a la influencia del anime y las historias de sus personajes. A partir de ese momento, supe que quería dedicarme a realizar dibujos animados. Y tanto es así, que he realizado mi primer cortometraje.
Aunque, he de decir, que no lo he realizado sola. Cómo he comentado anteriormente, ha sido un trabajo de dos. El otro animador es José Antonio Martín Jurado, el cual, hace no muchos artículos, fue mencionado ya que realizó el arte visual de un nuevo videojuego. Juntos, hemos convertido nuestro proyecto final de grado en una joya visual.
El objetivo que teníamos en mente era simple: crear un cortometraje que entretenga a todo tipo de públicos, que tratase un tema serio pero con humor. Hasta ahí todo bien, ¿verdad?. El verdadero problema surgió cuando nos decidimos por las técnicas a realizar, no usamos una o dos, sino cinco técnicas totalmente diferentes entre sí. A esto hay que sumarle que estamos hablando de un proyecto final de grado, es decir, teníamos un mes para realizar completamente todo. Fue y es una idea bastante ambiciosa pero ¡SPOILER! lo conseguimos con éxito.
El tema principal es la purpurina, como se puede intuir por el título que decidimos ponerle al cortometraje. Nosotros (los creadores) odiamos esta sustancia. Mezclamos ese sentimiento con la idea de que la purpurina es tóxica, tanto para el medio ambiente como para todos los seres vivos. Al mezclar estos dos conceptos tan diferentes, decidimos crear una historia simple a la vista, pero que esconde varios secretos.
Personajes y técnicas
A continuación, es hora de presentaros a los grandes protagonistas de esta historia, los bomberos. Al aparecer bastantes personajes durante el corto, nos repartimos el trabajo para que fuera equitativo. Al igual que decidimos qué técnicas íbamos a usar para cada personaje. Esta forma de trabajar os puede sonar un poco parecida al “Asombroso mundo de Gumball” y es que es este, una de nuestras principales referencias. Nos decantamos por las siguientes técnicas: Stop motion, 3D, 2D frame a frame, 2D con interpolaciones, rigging y acuarela tradicional.
Por un lado, tenemos a Loli y a Manolo, los dos personajes que yo me he encargado de diseñar. Manolo es el jefe de esta fantástica estación de bomberos y cómo podéis observar, está creado (gracias a José Antonio) con plastilina. Si, efectivamente, hemos integrado un personaje en stop motion en unos escenarios 3D increíbles. Cómo veréis en el corto, es el ser más pequeño en comparación con los demás y eso, tiene una explicación. Por otro lado, tenemos a Loli, nuestra secretaria de confianza. Con sus uñas pintadas y divina en cada situación. Este personaje está diseñado en un estilo flat design, es decir, con colores planos. En este caso, realizado en Illustrator y posteriormente animado a través de rigging en Toon Boom Harmony.
Aquí presentamos a Xavi y Arlo, los personajes creados por José Antonio. Como veréis, todos los personajes que están apareciendo están dibujados en distintos estilos. Ese era uno de nuestros objetivos principales antes de empezar a crear. Ambos son bomberos, es más, son los únicos que hay. Xavi es el típico guaperas al que le encanta fardar. Es un personaje muy juvenil y está realizado con rigging en Toon Boom. Finalmente, nos encontramos a Arlo, el único personaje realizado frame a frame. Tiene una personalidad muy hippie y va siempre a su rollo. Algunas veces, demasiado…
Por último, la familia Henderson. Los bomberos tendrán que rescatar a la familia de su pequeño accidente. Y es que, en este mundo tan peculiar, la purpurina es equivalente al fuego. También, como símbolo de nuestro mensaje inicial y nuestro objetivo a difundir. El estilo de dibujo de la familia es muy variado: desde el collage de imágenes, hasta el flat design. Los tres están animados a través de rigging. Cabe destacar, que ha sido un trabajo duro a la hora de saber integrar cada personaje con sus respectivos fondos y que no diese la sensación de que estaban pegados en la pantalla. Algo de lo que hablaremos a continuación.
Proceso
Por si no lo sabéis, crear una animación, ya sea un corto como en este caso o un largometraje, tiene varias fases. Entre ellas: preproducción, producción y postproducción. Para nosotros, aunque el reto era difícil, al ser dos personas, era mucho más cómodo y rápido repartirnos las tareas.
Para la fase de preproducción, básicamente hay que realizar todos los diseños, tanto de personajes como de fondos, listos para animar. Al igual que hay que tener bien construida la historia y la animación, a través de un guión técnico y narrativo y una animática. Para aquellos que no estén familiarizados con este último término, una animática es realizar con las poses y momentos claves que ocurren en la historia una animación a modo de boceto. Esto sirve para saber cuánto tiempo dura cada escena y cuanto va a durar el cortometraje entero, como una especie de borrador y guía para todo el proceso de producción.
La siguiente fase es animar, animar y animar. Para una producción en la que se utilizan demasiadas técnicas, como el 3D, el stop motion o la acuarela, es muy fácil confundirse y agobiarse a la hora de montar una escena entera. Hay que tener todo muy bien organizado para que cuadre perfectamente. Con los fondos, mostramos un ejemplo de ello. Para que os hagáis una idea, cada objeto minúsculo es una capa totalmente distinta e independiente que vas colocando como si fuera una maqueta. Hay que tener muchísima paciencia. Cómo es evidente, es la fase que más se tarda en terminar.
Finalmente, la postproducción. Se trata de hacer los créditos, porque efectivamente, los créditos también llevaban animación (podéis ver un artículo sobre ello en la web). También es una fase en la que se dan los últimos retoques y se unen todos los vídeos en uno solo para montar el arte final. A todo esto se suma la realización de una memoria o cuaderno de bitácora donde se va apuntando que hacemos cada día, qué problemas hemos tenido, para que no se nos olvide y sepamos cómo abordar los problemas.
Y así, es como se realiza un cortometraje de animación. Espero que os haya servido de inspiración y que os haya gustado el proceso. Si tenéis alguna duda o queréis saber más podéis contactarnos por nuestras redes sociales. ¡Disfrutad de la historia!
"Operación Purpurina", una historia de lo más surreal
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